Durante el mes de mayo cuatro alumnos de cuarto de la E.S.O junto con dos profesoras realizamos un viaje al norte de Francia (Alsacia), a un precioso pueblo llamado Ribeauvillé gracias al proyecto Erasmus +.

En nuestra estancia de cinco días, tres de nosotros nos alojamos en un rústico y acogedor hotel con las profesoras, y uno de nuestros compañeros estuvo con una familia que le acogió generosamente y con los brazos abiertos. Fueron dos experiencias distintas, pero las dos igual de gratas.

Todas las mañanas íbamos a colegio, la primera hicimos un juego para conocer a todos los chicos de diferentes nacionalidades, eslovacos, polacos, italianos y franceses. A lo largo de la mañana tuvimos la oportunidad de formar parte de una clase de español en el colegio francés, lo cual nos permitió observar las diferencias en la educación y en la forma de enseñar.

Por la tarde visitamos un castillo de la Edad Media en lo alto de una montaña en las cercanías del pueblo. Fue una gran experiencia.

A partir del segundo día, acudíamos al colegio a ensayar la presentación final que habíamos preparado anteriormente, la cual tendría lugar el mismo jueves 17. Por las tardes tuvimos el privilegio de poder conocer más lugares típicos y de interés de la zona. Además, compartimos las cenas con nuestros amigos internacionales, con los que pudimos entablar diversas conversaciones gracias al idioma que traspasa fronteras, el inglés. A medida que pasaban los días, nuestras relaciones aumentaban y lo que empezó como un simple compañerismo, acabó en amistad.

Llegó el día, todos estábamos nerviosos ya que era el día de la conferencia final que tanto nos habíamos preparado durante esa semana. Viajamos a Colmar, el pueblo en el que la conferencia iba a tener lugar.

Esta conferencia trataba de cómo sería la escuela ideal según las diversas propuestas por parte de cada país. Los españoles cerramos la presentación con la exposición de las reglas de conducta que deberían darse en un colegio.

A pesar de nuestros nervios y preocupaciones todo salió estupendamente

Todos coincidimos en que ha sido una experiencia inolvidable que, por supuesto, repetiríamos.