
CARÁCTER PROPIO
Nuestros centros educativos ofrecen una educación impregnada en las raíces carismáticas de la intuición educativa de José de Calasanz y de la visión profética de Paula Montal que quiso brindar esta educación integral a la mujer y, así, revitalizar la identidad y misión propia de la familia.
Hoy, a nuestros alumnos y alumnas, les invitamos a recorrer un camino educativo que les ayude a crecer integralmente como personas, les ofrecemos la oportunidad de afianzar su identidad cristiana a través de nuestra pastoral educativa y les acompañamos para que se vayan integrando en la sociedad con un compromiso solidario y humanizador.
Es posible realizar este sueño educativo si padres y educadores unimos nuestro empeño para ofrecer a nuestros niños y jóvenes una educación en la verdad, la bondad y la belleza. Verdad, bondad y belleza son elementos intrínsecos al ser humano y camino universal en la búsqueda de transcendencia propia de cada persona, y en la riqueza de las múltiples culturas en los distintos continentes donde nuestra misión educativa se realiza.
Educar en la búsqueda de la verdad conduce, poco a poco, a la unidad en el conocimiento de la identidad y misión propia en este mundo frente al peligro de la fragmentación existencial.
Educar en la bondad conduce a descubrir la bondad innata que existe en todo ser humano y la capacidad que tenemos las personas de transformar, creativa y positivamente, nuestro entorno haciendo el bien.
Educar en la belleza es ayudar a nuestros niños, adolescentes y jóvenes a gozar de armonía interior y exterior, y sabemos que el orden y la armonía es camino de la serenidad y de la paz que hoy, nuestro mundo, tanto necesita.
Con ilusión ofrecemos este documento de «nuestro estilo educativo», en él encontramos pautas que nos ayudarán a seguir estimando, valorando y amando esta noble tarea de EDUCAR.
Que José de Calasanz y Paula Montal nos bendigan.
Con afecto.
Divina García Calzada, Sch.P.